Es uno de los métodos anticonceptivos más seguros pero, si no se utiliza correctamente, puede fallar. Para evitar riesgos, es importante seguir al pie de la letra las instrucciones y hacer un buen uso de ellos. Éstos son los factores que hay que tener en cuenta:
- Asegurarse de que no esté caducado: Tomar como norma comprobar la fecha de caducidad, sobre todo si no se ha comprado recientemente.
- Comprobar que esté en buen estado. El calor y la humedad pueden dañar el látex, especialmente si ha permanecido demasiado tiempo guardado en el bolsillo del pantalón o en la guantera del coche.
- Elegir bien la talla. Si el tamaño es el adecuado quedará ajustado al pene. Si no es así, puede deslizarse y desprenderse.
- Colocarlo bien. Debe sujetarse por la punta para evitar, de esta manera, que quede aire en su interior.
- Ponerlo desde el primer momento. Limitarse a ponerlo justo antes del orgasmo, no protegerá de las infecciones de transmisión sexual. Además, hay que tener en cuenta que antes de la eyaculación, el pene segrega un líquido que puede contener espermatozoides.
- Retirarlo después de eyacular. Si se espera, la erección disminuye y existe el riesgo de que se derrame semen en el interior de la vagina.
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